Pablo Pérez
De
nuevo el Gobierno toma decisiones equivocadas que no resuelven la pérdida del
poder adquisitivo del trabajador venezolano. Ni siquiera es pan para hoy, pero
además será mucha más hambre para mañana porque la inflación desapareció
cualquier vestigio de bienestar.
Durante
casi 17 años la única política de protección del trabajador venezolano por
parte del actual Gobierno, ha sido aumentar el salario mínimo. No hay nada
más y eso ocasiona que todos esos porcentajes se hayan diluido en el marco de
una inflación que nos pone como una vergüenza mundial en materia de
políticas económicas.
Mientras
el Gobierno se empeña en aumentar el salario mínimo, el resto de la escalas
salariales se han rezagado peligrosamente, lo que ha ocasionado que muchos
profesionales, hasta con estudios de 4to nivel, estén por debajo del
salario mínimo o la diferencia sea muy poca. El empobrecimiento de la
clase trabajadora venezolana es abismal.
Pero
el Gobierno se empeña en no ver eso. No sólo ha creado su mundo de mentiras,
sino que se creen sus propias mentiras como le ocurrió a aquel ministro, hoy
candidato a la AN, quien dijo que los trabajadores que ganaban salario mínimo
hasta podían ahorrar.
Como
ahorrar si ni siquiera el aumento del salario mínimo cubre por lo menos la mitad
del costo de la Canasta Alimentaria Familiar que para agosto estaba
en casi 35 mil bolívares y ni siquiera representa una cuarta parte del
costo de la Canasta Básica Familiar que supera los 75 mil bolívares.
Nadie
vive con ese salario mínimo. Me lo demostró una indígena con la cual
hablé la semana pasada en un barrio de Machiques. Ella me dio una clase
magistral de los efectos de la crisis en la microeconomía, cuando me dijo que
un kilo de arroz le había costado Bs. 450 y por un pollito muy pequeño había
pagado Bs. 500, lo que totaliza Bs. 950, sin haber comprado verduras, sólo
para un almuerzo y sin contar la cena.
Como
ella está la inmensa mayoría del país: sobreviviendo. Lo más triste
es que mientras el venezolano lucha por sobrevivir, al Gobierno lo único que le
importa es su permanencia en el poder. No le importan las calamidades
que pasan los venezolanos, porque ellos no viven, ni sienten la crisis
acomodados en sus posiciones de poder.
Este 6D tenemos la oportunidad histórica de
comenzar a acomodar el presente, para construir un futuro de progreso y
oportunidades. Si quieres una Venezuela digna donde vivir, tienes que votar. La
Unidad somos todos.
@PabloPerezOf
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